La presión asistencial del trabajo cotidiano puede propiciar una atención sanitaria atolondrada en la que es fácil dejarse atrapar por los automatismos que conducen a numerosas tomas de decisiones, que con frecuencia no generan ningún valor añadido ni alivian el sufrimiento de los y las pacientes. Sabemos que las personas con pluripatología y aquellas que tienen determinados criterios de complejidad clínica, social o asistencial no suelen estar recogidas en las guías clínicas habituales. En esta tipología de pacientes se acentúa especialmente la diferencia entre el planteamiento teórico y la realidad asistencial. La práctica de la medicina basada en la evidencia y la definición de la atención que requiere cada paciente se topa con la realidad de las preferencias y de lo posible.
A ningún/a profesional de los servicios sanitarios le resulta nueva la importancia que tiene en la práctica clínica la necesidad de analizar los problemas, identificar adecuadamente las intervenciones, definir un plan de acción y evaluar los resultados. Todo ello forma parte del bagaje profesional. Sin embargo, en los últimos años se han realizado aportaciones muy significativas sobre las dimensiones que deben ser evaluadas en el contexto de cada paciente y sobre cómo incorporar a la persona en la toma de decisiones, en un camino de activación progresiva hacia un liderazgo compartido entre pacientes y profesionales. Para dar respuesta a este nuevo reto es necesario iniciar un proceso reflexivo entre el equipo de profesionales y de éstos/as con los y las pacientes y sus referentes o personas cuidadoras.
El objetivo de este IV Foro OPIMEC es propiciar un espacio de reflexión entre profesionales, compartiendo experiencias y herramientas básicas para asegurar una atención sanitaria centrada en la persona y no en enfermedades, incorporando los valores y preferencias del/la paciente a través del Plan de Acción Personalizado. Intentamos con ello conseguir, en una intensa jornada de reflexión y diálogo, hacer una valoración de dónde estamos y cuáles son los retos y desafíos para alcanzar, en la práctica, una personalización de la asistencia integral